domingo, 17 de febrero de 2008






QUISIERA


Quisiera,
el silencio a punto de ser mortuorio esta vez
me lo dijo... quisiera.
Arrancar sin camisa de fuerza
tu introvertido dolor,
ayudarte a regar las flores
que podrías plantar en tu vida,
erguirme como una madre asustada,
cada ataúd de tus visiones,
cada capítulo, cerrar quisiera.
Con todas mis calaveras,
junto a ellas darte una razón,
tan sólo un motivo para vivir,
tan sólo un sentido cuerdo para seguir tener quisiera.
Verdosas botellas que contienen uno o más litros,
nos dan 11,5 grados para llenar nuestra soledad
y parar quisiera, frenar de una maldita vez,
pues 4 planetas giran en una turbulenta galaxia
y el sol lentamente se apaga
dejando a 3 lunas de luto.

Qué rumbo hemos elegido, tener uno,
quizás también lo quisiera.
El presente está muerto,
y el pasado que actúa como sombra nuestra
se esconde en cajas abandonadas, y yo abrirlas
y quemarlas quisiera para en su humo,
vernos jugar a destruir el dolor de vivir así.
El camino es resbaladizo y el hielo permanece intacto,
en las vírgenes cavernas del alma
y en el congelado manantial de lágrimas,
pero los caminos de asfalto
no conducen a felices vivencias,
y avanzar o retroceder sin una ruta marcada
es dar un paso y al próximo caer,
y aunque no sea yo un ejemplo de levantarse...
¡levántate!... porque sé que hemos reconocido y acariciado
la locura y la sabiduría del perdedor,
llegando así a aprender sintiendo
la espiritualidad y la sensibilidad de vivir.
Por eso anhelos tener quisiera.
Por eso poder comprenderte, quisieras.






1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, soy Muriel , una amiga de Piero, y por el he podido acceder a tu blog. Me gustaron mucho los poemas, disfrute de una balsamo de bellas palabras en un mal día , rutinario y malherido. Me gustaria poder conocerte en Antofagasta alguna vez ...
saludos